Nadie me enseño a dar pasos agigantados para conseguir ser quien soy. Poco importan las palabras ciegas que intentan dañar a mi persona ya que hace tiempo que deje marchar el tren del sentido comun y de la razon al corazon.
Camino a zancas en una playa demasiado pequeña a veces para mi gusto, con unas vistas limitadas… Solo hasta donde la vista me permite ver y mas alla…. Mas alla…No veo nada.
He perdido gente en mi camino, gente que no podia permitirme perder, quiza por inutil, imbecil o gilipoyas, quiza porque no he sabido cuidar a esa gente lo suficiente…. Pero que no se diga que aun con todo el mal que me han podido hacer, o me hacen yo realmente no tengo malas palabras para ellos. No en mi trocito de tierra de mojada…
Nadie me enseño que era dificil caminar a zancadas sin alguien que te pueda sujetar para no caerte.
Lo cierto es que cuando el sol baja hasta el mar y el cielo se torna de colores anaranjados, me siento a contemplar en silencio y por un instante pueo sentir el latido de mi corazon…
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